martes, 2 de septiembre de 2014

Yo me libré en Valparaíso

El pasado sábado 30 de Agosto se realizó la 1era versión del "Yo me Libro" en Valparaíso, iniciativa impulsada por la Editorial Quimantú y organizada en el puerto por una serie de organizaciones populares y editoriales independientes que se tomaron Plaza Victoria desde pasadas las 12 del día hasta bien entrada la noche.

En la oportunidad, se montó una interesante feria en donde los libros eran los actores centrales, acompañados también por comida vegana, trabajos artísticos y todo lo que la imaginación permitía en el espacio que recupera por la comunidad organizada, se transformaba en escenario de articulación y vínculos, de palabras y emocionalidades que confluían. 
Participó gente de Valparaíso, pero también de Santiago. Se recitaron poesías y se compartieron pasajes de algunos libros. También hubo lanzamiento de libros que se ponían a precios módicos, a disposición de las personas y familias que llegaron a participar de la 1era versión del "Yo me Libro" realizado en Valparaíso. 
También acompañó la jornada la música de artistas porteños y de otros rincones del país. Claudio Martínez, trovador avecindado en el puerto fue uno de ellos, como también el dúo de Jazz que entregaba melodías que invadían el espacio y que según muchos, es una de las músicas ideales cuando se anda cachureando lecturas, palabras e imágenes. 
L@s Compañer@s de Espacio Santa Ana de Cerro Cordillera compartieron el Mapa de Valparaíso trabajado en el Mapeo Colectivo realizado con Iconoclasistas, CRAC Valparaíso y otras organizaciones. También estaba la Radio Placeres vendiendo sus discos Sello Placeres y poleras 25 años para su autogestión, o la Coordinadora de Organizaciones que quiere sacar al Alcalde Castro como máxima autoridad comunal. Andaba el periódico El Irreverente y variada literatura libertaria.  
El "Yo me libro" finalmente se transforma en la perfecta excusa para ocupar un espacio público que está en peligro, gracias a la genial idea de estacionamientos subterráneos; para motivar la lectura y compartir libros a bajo costo de editoriales que más que el lucro, buscan la liberación de las ideas; para encontrarse con compañeros y compañeras y continuar el proceso de articulación popular necesario para transformar la realidad; excusa ideal, para motivar otras formas de economía, una local y social, una en el que la explotación de otro ser humano, no es más que una historia reciente contada con palabras que subvierten la realidad.

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